En el Catálogo del Archivo Diocesano de Pamplona consta que esta iglesia existía ya en 1531, siendo patronos de la misma los señores de la Casa de Arriaran, que durante mucho tiempo se reservaron la facultad de nombrar al vicario y a la serora.
Los "Libros de Cuentas de Fábrica" nos proporcionan información a partir de mediados del siglo XVII.
Sabemos que en 1662 la iglesia amenazaba ruina, y que el maestro cantero Martín de Garatechea informó sobre las obras urgentes a acometer en muros, tejados y campanarios. El cantero Juan de Zavala se comprometió a ejecutarlas por la suma de 300 ducados.
Hacia 1740 Joseph Antonio de Iparraguirre e Ignacio de Ibero trazaron sendos diseños para el retablo principal, que fue adjudicado en 1745 a Pedro de Pellón. La talla de las imágenes recayó en el escultor Juan Bautista de Mendizabal y su estofado y dorado corrió a cargo de Joseph de Quintana.
En un informe pericial de finales de 1747, Ignacio de Ibero denunciaba el lamentable estado de la cubierta y la necesidad de realizar las bóvedas y prolongar la torre.
Hacia el año 1773, Juan Elías Insaurandiaga diseñó "la ejecución de las obras de la torre de campanas, bóvedas y otras". Se obtuvo la licencia para iniciarlas en 1780. Sin embargo, estas obras tuvieron un desarrollo muy lento por falta de fondos.
Tras la guerra de la Independencia en 1817, Manuel Antonio de Machain definió nuevamente las obras a realizar en la iglesia, haciéndose cargo de las mismas el propio Machain y Pedro de Eizaguirre. Tasadas en 38.523 reales, terminaron de pagarse en el año 1842.
OBRAS SUBVENCIONADAS
Reparación de cubiertas, consolidación de bóvedas y restauración del retablo principal y de la Dolorosa.
IMPORTE DE LA SUBVENCION
Plan 1997: 5.000.000 ptas.
Plan 2003: 30.000 €
Plan 2004: 170.000 €
Plan 2005: 52.000 €
Plan 2007: 11.100 €