Sobre una iglesia anterior del siglo XIV, reformada en el XV, se edificó la actual en el siglo XVI. La primera época de esta iglesia es fácilmente detectable a través de los numerosos vestigios góticos que conserva, como el hermoso ventanal con tracería gótica del ábside, hoy tapiado, apoyos góticos en la nave, crestería gótica que remata una de las capillas, etc...
Las obras de ampliación o reconstrucción se iniciaron en el año 1564, bajo la supervisión del arquitecto Juan de Vallejo, que trabajaba por esta época en la catedral de Burgos. Participaron en ella los maestros canteros Domingo de Errestaburu y Martín de Armendia, a los que se contrató para "subir las paredes al remate y altura que han de tener con su tablamento", según la traza de Juan de Vallejo. El plazo fijado fue de doce años, que después se prorrogó por cuatro Plans más.
En 1580, ante la urgencia de reconstruir el campanario, se suspendieron las obras en la nave del templo por espacio de cinco Plans, tiempo que se tardó en terminar el remate de la torre.
Se pidieron trazas a Domingo de Errestaburu, y a otros maestros canteros como Juan de Mendizábal y Miguel de Bolivar. Consta documentalmente que "la obra de la torre e campanario se resolvió y se abrazó con la traza e orden que para ello el maestro Miguel de Bolivar dio".
El autor de la traza del retablo mayor fue el arquitecto Miguel de Irazusta. Habiendo fallecido éste en 1743, construyó la parte arquitectónica del retablo su discípulo Diego Martínez de Arce, mientras que del trabajo escultórico se hizo cargo el escultor Luis Salvador Carmona. Entre ambos lo finalizaron para el año 1747. Este mismo equipo había colaborado en la realización del retablo de Santa Marina de Oxirondo.
La portada principal se realizó a la manera neoclásica en el año 1878.
Iglesia de planta de salón con tres naves de igual altura y ábside poligonal. Es uno de los ejemplares más representativos de las iglesias columnarias vascas.
Las naves, de cuatro tramos, se cubren con bóvedas de crucería que descargan en esbeltas columnas clásicas de fuste cilíndrico con columnillas adosadas.
Hay una pequeña capilla cuadrangular adosada al presbiterio, y otra algo mayor a la altura del tercer tramo de las naves, ambos en el lado del evangelio.
En el lateral de la epístola existe un pórtico con arcos de medio punto. Junto a él se abre la portada principal, de traza clásica y gran riqueza ornamental.
Los muros son de sillería con contrafuertes que se corresponden con pequeñas columnas semicilíndricas.
Este inmueble está declarado Bien Cultural Calificado por Decreto del Gobierno Vasco 265/1984 de 17 de Julio y el retablo mayor también está declarado Bien Cultural Calificado por Decreto del Gobierno Vasco 273/2000 de 19 de Diciembre.
OBRAS SUBVENCIONADAS
Reparación de cubiertas y bóvedas, acondicionamiento interior del templo, arreglos en el pórtico y reparación de la maquinaria del reloj e iluminación del entorno.
IMPORTE DE LA SUBVENCIÓN
Plan 1985: 10.000.000 ptas.
Plan 1987: 700.000 ptas.
Plan 1988: 700.000 ptas.
Plan 1995: 1.000.000 ptas.
Plan 1996: 7.000.000 ptas.
Plan 1997: 7.000.000 ptas.
Plan 2002: 14.210 €
Plan 2003: 216.000 €
Plan 2004: 213.700 €
Plan 2005: 142.000 €