La ermita de Santa Marina, ubicada en el casco antiguo de Zarautz, es en realidad una minúscula capilla que llama la atención más por ser un elemento urbano singular que por su valor arquitectónico.
Desde el punto de vista histórico su único interés estriba en que esta capilla es continuación de una ermita anterior mucho más antigua de la que posiblemente procedan las tallas de madera policromada que aún se conservan. La capilla actual fue reconstruida en el año 1932.
Sí tiene interés, sin embargo, las tres esculturas policromadas, datables por sus características en el siglo XVI. Una de ellas podría representar a Santa Apolonia o San Juan Evangelista, otra a Santa Marina y la tercera es un Cristo Crucificado. Las tres son de una sola pieza vaciada por la parte posterior.
Cuando hacia el año 1992 se efectuaron obras de restauración y acondicionamiento de la ermita, gravemente afectada por humedades procedentes de la cubierta, quedaron más en evidencia por su mal estado de conservación las tres imágenes que acabamos de citar, ya que se advertía el ataque de insectos xilófagos en algún caso, quemaduras de importancia en otros, y pérdidas de policromía y abundante suciedad en todos.
OBRAS SUBVENCIONADAS
Tratamiento desinfectante y bactericida de carácter curativo y preventivo, eliminación de los repintes, fijación de la policromía y protección final de cada una de las tallas.
IMPORTE DE LA SUBVENCION
Plan 1993: 400.000 ptas.