SAN PEDRO

Próxima a la carretera que desde el núcleo urbano de Zegama conduce al puerto de Otzaurte y teniendo como telón de fondo la cara Norte de la sierra de Aitzgorri se alza la ermita de San Pedro, edificio humilde que, careciendo de elementos alusivos a su función religiosa, tan peculiares como la espadaña, el campanil o la simple cruz, parece a distancia una simple borda.
Aunque su origen es posiblemente anterior, como luego veremos, Luis Murugarren, en su "Relación de Puntos Religiosos de Guipúzcoa", da el año 1641 como fecha más antigua en que se constata documentalmente su existencia.
Es de planta rectangular, con cubierta a dos aguas y muros de mampostería de piedra arenisca sin revoco alguno.
Hacía tiempo que estaba cerrada al culto, e incluso había desempeñado las funciones de escuela pública durante un largo período, razón por la cual se abrieron en sus muros cuatro ventanas y se adosó a su fachada trasera un rudimentario recinto destinado a aseo.
En su interior, al que se accede por una puerta adintelada, seguían instalados varios pupitres con sus correspondientes sillas como testigos mudos del último uso que albergó. Permanecía también en su emplazamiento natural un sencillo retablo presidido por una talla en madera de San Pedro, y bajo él un altar con un orificio lateral, que es posible apreciar en varias ermitas guipuzcoanas. Todavía perdura la creencia de que introduciendo la cabeza en dicha oquedad y rezando un Credo, se ahuyentan los dolores de cabeza.
Pero el detonante principal que marcó el inicio de las obras de restauración fue el descubrimiento de una gran losa de piedra arenisca integrada en el pavimento del presbiterio, con una serie de inscripciones y motivos decorativos que, analizados por expertos de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, condujeron a la conclusión de que aquella losa era una lápida funeraria romana datable en los primeros siglos de nuestra Era, lo que confería a la ermita un inusitado valor arqueológico.
En la posterior excavación arqueológica realizada por Arkeolan no se descubrieron restos romanos pero sí indicios de que el yacimiento fue ocupado en época medieval, lo que por otra parte parece lógico si se tiene en cuenta la importancia que en dicho período tenía el camino que pasando por las inmediaciones de la ermita atravesaba el paso de San Adrián comunicando a Gipuzkoa con Alava.
Este inmueble está declarado Bien Cultural Calificado por Decreto del Gobierno Vasco 14/2000 de 25 de Enero.

OBRAS SUBVENCIONADAS
Eliminación del adosado degradante, cierre de las ventanas, acondicionamiento exterior e interior de sus muros, renovación de la cubierta y excavación arqueológica.

IMPORTE DE LA SUBVENCION
Plan 1991: 2.850.000 ptas.

ZEGAMA

IMAGENES

• 
• 
• 
•