Se trata de un pequeño templo rural de planta rectangular con cubierta a dos aguas y alero sujeto por jabalcones. Los muros son de mampostería con esquinales de sillería y la puerta de acceso adintelada. Remata la cubierta un sencillo campanil de hierro.
En el interior se conserva el retablo barroco original y un Santo Cristo de finales del XV o comienzos del XVI.
Cuenta la tradición que cuando traían herido a Iñigo de Loiola descansó en el Humilladero del Santo Cristo que existía en este lugar. Cuando a finales del siglo XVII fue proclamado santo, se construyó la ermita en recuerdo del paso de Iñigo por dicho lugar.
Parece ser que algún paramento interior estaba decorado con pinturas al fresco y que éstas fueron tapadas con pintura blanca en las últimas obras de reforma realizadas hace unos años.
OBRAS SUBVENCIONADAS
Restauración de la cubierta y restauración de la imagen del Cristo.
IMPORTE DE LA SUBVENCION
Plan 1993: 1.000.000 ptas.
Plan 2001: 400.000 ptas.